Mantenimiento rutinario
Antes de empezar a trabajar con un manipulador telescópico, el operador debe realizar un mantenimiento rutinario. Esto incluye la inspección visual de la máquina y la comprobación de algunos componentes críticos para verificar que todo funciona correctamente y que el manipulador telescópico se puede utilizar con seguridad.
Algunas cosas que deben hacerse durante las comprobaciones rutinarias son (sin ningún orden en particular):
- Asegurarse de que no hay daños en la máquina, como soldaduras partidas, grietas en el metal o cualquier otro tipo de daño estructural;
- Comprobar todos los niveles de líquidos, incluidos el refrigerante y el aceite del motor, el líquido hidráulico, el líquido de frenos, etc.
- Inspeccionar las mangueras en busca de signos de desgaste y comprobar que no haya fugas;
- Comprobar y cambiar los filtros;
- Comprobar que los neumáticos no están agrietados ni dañados de otro modo y, si los neumáticos están llenos de aire, comprobación de que están suficientemente llenos;
- Inspeccionar las pegatinas, calcomanías y etiquetas y sustituirlas si están dañadas o son ilegibles.
- Inspeccionar los implementos en busca de signos de daños;
- etc.
Además de las inspecciones anteriores, el operador debe realizar pruebas de funcionamiento para confirmar que todos los componentes y funciones básicos funcionan correctamente. Esto incluye comprobar la dirección y los frenos, asegurarse de que todos los controles de la pluma y los implementos funcionan, comprobar el indicador de estabilidad de la carga (LSI o Load Stability Indicator), etc. Si estas pruebas revelan algún problema, el manipulador telescópico no debe utilizarse hasta que se hayan efectuado las reparaciones.
Ten en cuenta que estas comprobaciones y pruebas sólo deben realizarse cuando el manipulador telescópico esté aparcado en una superficie nivelada con la pluma en posición vertical. El operador también debe consultar siempre los manuales de funcionamiento y mantenimiento de la máquina para obtener una lista completa de todas las inspecciones necesarias.
Mantenimiento preventivo
Los manipuladores telescópicos deben someterse a inspecciones exhaustivas, además de las comprobaciones diarias realizadas por el operador. Durante el mantenimiento preventivo, un técnico busca problemas incipientes y defectos menores antes de que puedan convertirse en defectos más graves y la consiguiente avería de la máquina. Si la inspección revela problemas, hay que solucionarlos y sustituir todos los recambios necesarios antes de volver a utilizar el manipulador telescópico.
En el caso de algunos recambios, como los neumáticos, es más fácil saber cuándo hay que sustituirlos porque muestran signos reveladores de desgaste. Sin embargo, siempre es mejor consultar el manual de la máquina, que contiene directrices sobre cuánto desgaste es aceptable para componentes específicos. El manual también indica la frecuencia con la que debe realizarse el mantenimiento preventivo (más sobre esto más adelante). Es importante cumplir este calendario predeterminado, ya que un mantenimiento a tiempo garantiza que los problemas no empeoren porque pasan desapercibidos durante mucho tiempo.
Para más información sobre el mantenimiento rutinario y preventivo, consulta nuestro blog sobre por qué es importante el mantenimiento de los equipos de construcción.